martes, 24 de diciembre de 2013

Two thousand thirteen.



2013 está a punto de acabar.



Un año que ha sido de lo más movido, cosas malas, buenas e incluso muy buenas he dejado atrás. Pero no me ha dejado un mal sabor de boca...


Terminar unos estudios (Que bueno, no me van a servir de nada de momento) y emigrar. Entonces llego Londres, Ahora vivo aquí, o lo intento al menos, y desde aquí me he dado cuenta de muchas cosas, de co
mo es de verdad la gente, las personas que me rodean, los sentimientos más profundos que puedo sentir y que muchas veces me infravaloro demasiado, me tengo que querer más.


He dejado gente atrás, en el pasado, quizá me arrepienta en un futuro no muy lejano, pero son gente que tampoco hacían mucho en mi vida. Gente que me sigue (y es recíproco) en la distancia, que seguimos preocupándonos los unos por los otros manteniendo una amistad de años y a las cuales aunque no hablemos muy amenudo me acuerdo mucho de ellas, las tengo muy presente y les echo muchísimo de menos, pero ya sabéis como soy, un desastre de persona en ese aspecto. Gente que me acompaña a día de hoy en la aventura de mi vida, que me siguen ayudando a crecer como persona y a vivir, a los cuales quiero y estaré eternamente agradecido y gente que ha aparecido nueva en mi vida, y que espero que sigan en ella, porque me están enseñado mucho, gente que conociendo apenas dos meses o incluso menos se les coge un cariño especial, trabajar con ellos, salir con ellos, hablar con ellos, en definitiva vivir con ellos, con todos ellos.


Gracias a todos estos grupos que he mencionado, soy como soy, tanto lo bueno como lo malo, pero me siento orgulloso de ser así, y es gracias a todas estas personas que me han ido guiando y aconsejando, dándome un toque de atención cuando era necesario. Mil gracias a todos vosotros.


Feliz Navidad.

jueves, 18 de julio de 2013

Sueños rotos

Tras años esperando noticias suyas, de repente me dí la vuelta; otro país otra ciudad otra vida, pero la misma mirada felina, sus ojos devoraron los míos, sonrió e inclinó un poco la cabeza, de la misma manera que lo hizo la primera vez que me di cuenta que estaba perdidamente enamorado de él. 

En ese instante no podía pensar en nada, sentía el corazón bombear fuerte, podía hasta escucharlo. La piel se me erizó y mis ojos se humedecieron... ¿Cómo algo tan efímero y hacía tanto tiempo podía aún aflorar ese sentimiento de miedo y de no saber qué hacer ni decir? ¿Cómo podía seguir queriendo a una persona después de tanto tiempo sin saber de ella? De tanto daño que me ha hecho. Sí, reconozco que había pensado en él, y sabía que aún sentía algo por él, ¿Pero hasta ese punto? 

Tras esos largos minutos de pausa en mi cabeza que me dieron a pensar en muchas cosas, seguía ahí, tan real como aquel invierno lluvioso bajo ese callejón escondido de nuestra ciudad, en antaño. "Está ahí, y es real" me repetía gritando en silencio. ¡REACCIONA! y un «Hola» era lo único que salió de mis labios. Sin más dilación se me abalanzó y me dio un abrazo, un abrazo que jamás podré olvidar, con la intensidad justa, en el momento justo y que me hizo sentir como si tuviera otra vez dieciséis años, su olor, su tacto... era todo tal como lo recordaba, el pelo más corto, pero bah, era él y estaba abrazado a mi. Podía sentir su respiración en mi cuello, sus brazos en mi espalda, todo era perfecto.

Cerré los ojos fuerte e intenté atrapar esa situación, grabarla en mi cabeza pero me di cuenta que no estaba haciendo lo que más quería. Disfrutarla. Me aparté y miré sus labios y después de un corto titubeo le besé. Ese beso tan cálido, tan como los nuestros, tan especial, cada vez podía creérmelo menos.

La magia me envolvía, todo daba vueltas a  mi alrededor y abrí los ojos. Estaba tumbado en la cama, todo había sido un sueño, todo había sido un puto sueño. ¿Por qué? ¿por qué mi subconsciente me la jugaba de esa manera? Me levanto y comienza un nuevo día. 

lunes, 25 de marzo de 2013

Cap ou pas cap




¡Dichosa Sophie! El Juego había vuelto a empezar.



“Felicidad en estado puro, bruto, natural, volcánico, que gozada, era lo mejor del mundo... Mejor que la droga, mejor que la heroína, mejor que la coca, chutes, porros, hachís, rayas, petas, hierba, marihuana, cannabis, canutos, anfetas, tripis, ácidos, lsd ,éxtasis... Mejor que el sexo, que una felación, que un 69, que una orgía, una paja, el sexo tántrico, el kamasutra, las bolas chinas... Mejor que la nocilla y los batidos de plátano... Mejor que la trilogía de George Lucas, que la serie completa de los Teleñecos, que el fin del Milenio... Mejor que los andares de Ally Mcbeal, Marilyn, la Pitufina, Lara Croft, Naomi Campbell y el lunar de Cindy Crawford... Mejor que la cara B de Abbey Road, los solos de Hendrix. Mejor que el pequeño paso de Neil Amstrong sobre la Luna, el Space Mountain, Papa Noel, la fortuna de Bill Gates, los trances del Dalai Lama, las experiencias cercanas a la muerte, la resurrección de Lázaro, todos los chutes de testosterona de Schwarzenegger, el colágeno de los labios de Pamela Anderson, mejor que Woodstock y sus fiestas mas orgásmicas...mejor que los excesos del Marqués de Sade, Arthur Rimbaud, Morrison y Castaneda... Mejor que la libertad... Mejor que la vida.”

jueves, 14 de febrero de 2013

Just love


¿Cuánto tiempo llevo convenciéndome a mí mismo que ese sentimiento no existe? ¿Cuánto tiempo llevo intentando ocultar ese sentimiento para no ser dañado como en antaño? Lo niego, lo niego mil y una vez hasta que llega un punto en el que te dejas llevar por las emociones y te preguntas, ¿Me arriesgo y me aventuro en una nueva experiencia? Luego le miras y todas las dudas se te quitan de la cabeza, a pesar de esas veces que piensas en dejarlo todo y salir corriendo, luchas, te quedas porque te seduce con su sonrisa tímida, aunque le cueste enseñarla lo hace,  esos ojos tiernos que te miran y se te eriza la piel, ese beso en la mejilla que te derrite, en ese momento sabes lo que sientes, en ese preciso momento te das cuenta de cómo te hace sentir, de cómo quieres sentirte, así, con él, el resto de tu vida.

Dejas de pensar en si te hará daño, que lo hará, dejas de pensar en las discusiones, que las tendréis, dejas de pensar en todo, porque lo único y verdaderamente importante es que estás compartiendo la vida con él. Con la persona que te hace sentir vivo. Y quiero que siga siento así. «Olvídate del pasado y simplemente sé suyo.»

I'm yours, all yours, just yours.
One&Only23.


lunes, 14 de enero de 2013

Todo está claro ya.



Yo no puedo disfrazar lo que siento, no, no se disimular, es lo que tengo, pero esto acabará en poco tiempo y yo empezaré a volar.

Y es que ahora no, no digas que estás mal, lo has hecho todo fatal, me sobra tu perdón.

Todo está claro ya.

domingo, 6 de enero de 2013

Fiery crash




[...]

- Hazlo, Nathan. Haz lo que de verdad quieres hacer. Sin pensar en nada más... Atrévete a hacerlo...

- Jeff, no.. -susurró negando débilmente con la cabeza.

Entonces él hizo algo que Nathan nunca hubiera esperado. Algo que no sabía si debería haber hecho. Algo que hizo que todo su mundo se tambaleara. en un movimiento rápido, Jeff agarró en un puño su pelo y se inclinó hacia adelante, uniendo sus labios a los de él.

Aquel primer contacto fue suave, cálido, escalofriante. Nathan perdió la conciencia de todo, de todo salvo del calor que sentía sobre su boca. Permaneció con los ojos cerrados, disfrutando de aquel contacto tanto como su sentidos le permitían, temiendo el momento en el que Jeff se apartaría dejando sus labios tan desnudos como hasta aquel momento.

Pero en lugar de eso, Jeff volvió a sorprenderlo. Incrementó la presión sobre su boca, haciendo que el beso se volviera más urgente, un aliento de necesidad. Ambos dejaron escapar al mismo tiempo un suspiro y sus manos se acercaron más hacia el cuerpo del otro.

Tal vez  la lengua no debería haber tomado partido en aquella batalla, pero no hubo forma de remediarlo. Nathan paladeo el sabor de Jeff en su boca, deleitándose en él, descubriendo que era aún más dulce de lo que podía haber imaginado porque, debía admitirlo, había imaginado aquello muchas veces. Más de las que podía recordar.

Con el pelo de Nathan aún bajo su mano, Jeff inclinó ligeramente la cabeza de Nathan hacia atrás, permitiendo un mayor acceso de su boca a la de él.

Cuando Nathan creía que ninguno podía estar ya más cerca de otro, Jeff le mostró lo equivocado que estaba. No había ni un centímetro de piel que no rozara con su cuerpo. No había aliento que el dejara escapar de su boca. No había calor que se enfriara entre los dos.

Jeff desplazó la posición de su boca para rendirle el culto al cuello de Nathan. En un momento de lucidez, Nathan fue consciente de que su toalla se había resbalado de su cintura hasta acabar hecho un montón en el suelo, frente a sus pies, dejando totalmente expuesto su cuerpo desnudo, con prueba palpable de su excitación al descubierto. 


[...]



~ Saillara

viernes, 4 de enero de 2013

Alone


Simplemente quieres dormir, alejarte de toda esta realidad que te rodea y zambullirte en tus más profundos sueños, el único lugar en el que estas a salvo, de ti mismo.

Piensas  y piensas.. y sólo quieres pensar en dejar de pensar, en que ojalá tu mente permaneciera en blanco y olvidarte de todo lo que te trastorna entrando en un círculo vicioso. Y otra vez esa jodida pregunta que te haces a ti mismo en esta situación, manteniendo nuevamente una conversación contigo mismo.

- ¿Por qué a mí?

- Eso suena muy a víctima, ¿Eres consciente?

- Sí, pero no por eso deja de ser real. Siempre he sido positivo, pero he llegado a mi límite

- ¿Y qué vas a hacer ahora?

- No lo sé, por eso esta conversación, ¿no?

- Alejandro. Eres fuerte, sé que de vez en cuando hace falta recordártelo, no puedes dejar que te influya esto. Has pasado por cosas peores que seguro no quieres recordar, cosas mucho perores. Tienes el apoyo de muchas personas que nunca te dejarán solo, muchas personas que te quieren, muchas personas que para ellas eres muy importante. Levántate y lucha por lo menos por ellos que sí merece la pena.

- Jo, siempre sabes que decir justo lo que necesito oír en el momento preciso para hacerme sentir mejor.

-  Yo no te lo digo, te lo dices tú mismo Alejandro, recuerda yo, soy tú. Calla, y duerme, es lo que necesitas... Buenas noches, descansa y sueña bonito.

- Pero.. pero.. pe... ¡No te vayas! ¡Eh! ¡Tú!... No... me dejes..solo.